Estaba sentado en la recepción de una compañía determinada esperando ver a su director comercial y en menos de 5 minutos ya me habían saludado, con una sonrisa y un hola, tres personas al pasar a mi lado cuando entraban a la oficina (era a primera hora).
Además la recepcionista había sido extremadamente amable al identificarme y exponer el motivo de mi visita.
Estaba allí para conocer la oferta de productos y servicios de dicha compañía para considerarla o no como proveedor para uno de nuestros clientes. La dinámica del proyecto en cuestión consiste en identificar y seleccionar los proveedores más cualificados, y proponer los tres mejores de acuerdo a unos criterios determinados. El cliente es el que finalmente decide
Esta amabilidad no me debería influir en la selección y puntuación, pero se positivamente que sí va a hacerlo (uno que es humano). Nadie sabía, de los que me saludaron, que era un potencial cliente (o más precisamente un prescriptor), simplemente había buena actitud y eso es importante siempre. Seguro que trabajan bien porque están a gusto en su trabajo ... ¡veis ya me está influyendo!
Además la recepcionista había sido extremadamente amable al identificarme y exponer el motivo de mi visita.
Estaba allí para conocer la oferta de productos y servicios de dicha compañía para considerarla o no como proveedor para uno de nuestros clientes. La dinámica del proyecto en cuestión consiste en identificar y seleccionar los proveedores más cualificados, y proponer los tres mejores de acuerdo a unos criterios determinados. El cliente es el que finalmente decide
Esta amabilidad no me debería influir en la selección y puntuación, pero se positivamente que sí va a hacerlo (uno que es humano). Nadie sabía, de los que me saludaron, que era un potencial cliente (o más precisamente un prescriptor), simplemente había buena actitud y eso es importante siempre. Seguro que trabajan bien porque están a gusto en su trabajo ... ¡veis ya me está influyendo!
5 comentarios:
Gran invento la sonrisa humana, ¿verdad?
Sin duda alguna Julen, aunque a veces más que un invento parece un descubrimiento
¿Y por qué no debería influir en la elección? Seguro que un estudio estadístico demostraría las ventajas de un buen ambiente laboral. En unos años, quizás esa uno de los criterios básicos para valorar a los proveedores.
Jaizki, justo eso es lo que apunto en mi comentario final
Perdona, no me había quedado clara la intención.
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