Según el mencionado Carr, "IT has become a commodity" - IT se ha convertido en una "commodity". No se como traducir commodity con una única palabra en castellano. El concepto es que se han convertido en algo como la electricidad, el agua corriente, el gas, etc... que lo pagas y lo tienes.
No se si es causa o efecto de lo anterior, pero frecuentemente los profesionales de las TIC, y éste es el tema de este post, nos vemos abocados a todos los niveles, desde los perfiles más técnicos a los de gestión, a lidiar con esa situación y/o sus consecuencias. Sin pretender hacer una lista exhaustiva me atrevo a improvisar lo siguiente:
- No se sabe muy bien que es eso de ser informático. Haces páginas Web, arreglas pecés, diriges equipos de más de 100 personas para implantar un ERP, vendes software, eres director de informática, ... todo es lo mismo (¿me puedes arreglar la plancha, tú que sabes de esto?) ... Como no está claro lo de informático los voy a llamar consultores.
- A ver hijo, explícame de qué trabajas - De consultor, mama - ¿Consultor?, ¿te pagan por consultar? - no mamá, es como ... mmm... informático - ¿informático?, que bien, ¿por qué no me arreglas la plancha, tú que debes saber de eso?
- Son unos techies, no saben que necesidades reales tienen las empresas. Se pasan la vida hablando un lenguaje que nadie entiende, no tienen visión de negocio, sólo ven su parcela, ...
- Hay muchos. Pegas una patada y salen 100. Por cuatro duros los subcontrato, aquí o en la India o en un trasatlántico en aguas internacionales.
El artículo original de Carr se puede encontrar aquí.
5 comentarios:
Por eso ha llegado el momento de dedicarse a otra cosa. Yo hace años que lo estoy intentando, pero no tengo tiempo con tantas planchas que reparar.
Hombre telémaco tampoco hay que ser tan radical. Yo lo que creo es que hay que dedicarse de otra forma, es decir, en lugar de trabajar para una gran corporación hacerlo en una más pequeña y con otro enfoque comercial, no trabajar por cantidad/volumen sino por calidad. Hay que buscar un modelo de negocio que no sea "comoditizable" (argh que horror de palabra otra vez). No te creas que tengo la solución, pero sí tengo la convicción de que es por ahí por donde se debe ir.
No sé si Carr fue el primero en lanzar esta idea, pero si el que más éxito ha logrado propagándola con su artículo y libro Does IT Matter?.
Yo no estoy de acuerdo en la total commoditización (tampoco me gusta la palabra) de las TIC, pero creo que es cierto que, en si mismas, no proporcionan una ventaja competitiva. La ventaja la obtienes de como tu organización es capaz de utilizarlas e incorporarlas en todos los procesos de mejora.
Lo que nos piden los Directores generales (o los clientes a los consultores) es que no nos recreemos en la tecnología en si misma, sino que sepamos convertirla en mejoras para la empresa.
Eso sí, mientras despegamos, no debemos dejar de arreglar las planchas. Pero, por favor, gastando menos que el año pasado y con planchas que sean más rápidas.
A mí también me ha pasado lo de la plancha.
Yo la explicación que doy es que la informática es como una gran ciudad, donde hay albañiles que construyen las casas, que son los programadores, personas que te arreglan un grifo o la plancha, que son el personal de mantenimiento, y personas que diseñan un edificio, que piensan en el Plan General de Ordenación Urbana, o que son alcaldes, que son los distintos diseñadores y gestores.
¿Tú llamarías a Alberto Ruíz Gallardón para que te arreglara una plancha?
Parece que esto sí lo entienden.
Carmen, primero bienvenida al blog, segundo que tu símil lo encuentro útil para explicar esto de la informática. Puede parecer por este post que soy muy pesimista, pero en realidad coincido mucho con Rafa en que somos nosotros, los profesionales, los que tenemos que identificar que valor y/o ventajas puede la tecnología traer para las empresas y la sociedad añadiría yo.
Siguiendo con el símil de la plancha, lo que creo que hay que hacer es (mientas aseguramos que las planchas funcionen) ir buscando una manera más efectiva de planchar o mejor: ver la manera de que no existan las arrugas.
Publicar un comentario