Vaya patatal que tengo formado en la cabeza. Esto de hacer tres proyectos a la vez, de clientes en tres sectores tan diferentes (uno de servicios tecnológicos, otro de servicios financieros y el tercero de ingeniería e instalaciones) me está estrujando las neuronas y taladrando el intelecto.
De pensar en como facturar servicios recurrentes con regularizaciones de cuota, paso a ver como leches modelar con un ERP un instrumento de cobertura de tipos de interés ligado a una póliza de crédito, pasando por si imputar el coste al proyecto cuando se certifica el avance o cuando llega la factura del proveedor.
Por ahora consigo no hacerme líos (o al final acabaré facturando costes de las pólizas en las cuotas y cubriendo con un SWAP las certificaciones de obra) y no mezclar, pero espero que el esfuerzo intelectual que me está exigiendo no me acabe de matar y me deje espacio para postear, aunque sean chorradas como esta... ya me lo perdonaréis.
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