Leo en la Web de la AEC (Asociación Española de Empresas de Consultoría) un artículo de Josep M. Sarriegui (creo que es periodista de el país) que empieza con un párrafo provocador como poco:
La consultoría ha perdido glamour para los jóvenes. Los sueldos elevados y la posibilidad de una carrera profesional brillante ya no motivan tanto si llevan aparejada una merma de la vida personal por culpa de jornadas de trabajo interminables.
Más tarde se cita a José de Rafael, director general de dicha asociación donde dice literalmente que:
El sector español de la consultoría recluta en Latinoamérica y Europa del Este ante la escasez de profesionales...
las nuevas hornadas de universitarios, hijos del mercado global de oportunidades, la nueva sociedad del bienestar y la cultura de la conciliación se vuelven tan exigentes como los clientes para conseguir su equilibrio soñado entre lo profesional, lo intelectual y lo personal
¡Oops! espera que esto promete... más abajo sigue diciendo:
Mientras tanto, los portafolios de servicios se profesionalizan a la par que complican (...) y florecen nuevos competidores que veneran a Shiva o tienen los ojos rasgados...
Cuidado, esto está tomando derroteros espinosos ... más adelante es citado un tal Todd Stein (socio y director general de Daemon Quest):
La curva de la natalidad ha provocado que haya menos titulados en ingenierías y empresariales, lo que unido a que la consultoría ahora no tiene el atractivo de hace 15 años, hace que tengamos esta plantilla tan multicultural...
Pero el tema sigue y para peor:
Pese a que los caladeros latinoamericanos y de Europa del Este se han revelado fructíferos, el sector de la consultoría también está realizando una apuesta fuerte por la formación para hacer frente a esta escasez de profesionales.
Así, la AEC ha lanzado este año un plan formativo dirigido a los empleados de sus empresas asociadas (un total de 90.000 personas) y también de otras firmas que acrediten que forman parte del sector de la consultoría.
Unos 25.000 trabajadores se beneficiarán del proyecto educativo. A él se destinan 10 millones de euros, de los que 9,5 corren a cargo de la Fundación Tripartita para la Formación en el Empleo, de la que forman parte Gobierno, patronales y los sindicatos mayoritarios, y el medio millón restante lo aporta el Plan Avanza del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, destinado a promover la implantación de la sociedad de la información. Entre los objetivos del proyecto de la AEC está el fortalecer profesionalmente el sector, impidiendo que se den abandonos y cambios de trabajo entre quienes lo integran.
¿De verdad creen que por dar cuatro cursos, pagados además con dinero público, van a motivar a nadie a que no abandone y se cambie de trabajo? Lo de caladeros me daría un complejo de bacalao que no me gustaría si fuera un joven recién licenciado
Cada día tengo más claro que la consultoría ya va por dos caminos: la industrializada y la de agente libre en red.
La primera, como se hizo antes en otros negocios, tiene que importar mano de obra especializada porque los autóctonos no la encuentran atractiva (por decirlo suave). Sigue los pasos de la agricultura, servicios de hostelería y limpieza, manufacturas muy manuales, ... eso cuando no se lleva los centros de producción fuera a factorías offshore.
Este tipo de consultoría necesita partners tecnológicos (que las condicionan operativa y comercialmente), compite en precio, en proyectos de ejecución grandes,... implantaciones de grandes sistemas de información o externalizaciones de procesos administrativos (BPO) por ejemplo... no es útil en proyectos pequeños, intensivos en materia gris no en fuerza bruta,... en mi opinión habrá que cambiarles el nombre, no son consultores en el sentido etimológico y semántico del término... no se les consulta, se les contrata para que ejecuten, 10% (o menos de pensamiento) y resto de ejecución.
La segunda - agentes libres en red - basa su fuerza en el conocimiento y la experiencia, flexibilidad, colaboración (aunque esto cuesta) con otros agentes libres, cercanía al cliente, independencia de partners tecnológicos y proveedores de software, ... y parece que está creciendo su número, en gran parte por la deserción de profesionales desde las industrializadas.
... pero esta esa es mi opinión claro.
La consultoría ha perdido glamour para los jóvenes. Los sueldos elevados y la posibilidad de una carrera profesional brillante ya no motivan tanto si llevan aparejada una merma de la vida personal por culpa de jornadas de trabajo interminables.
Más tarde se cita a José de Rafael, director general de dicha asociación donde dice literalmente que:
El sector español de la consultoría recluta en Latinoamérica y Europa del Este ante la escasez de profesionales...
Que es algo llamativo pero nada del otro mundo - son los signos de los tiempos y me parece conceptualmente saludable que suceda así. Es objetivamente bueno que venga gente brillante, por la incorporación de inteligencia en sí y porque nos obliga a ponernos las pilas a los que ya estamos aquí.
Pero sigo leyendo ...
las nuevas hornadas de universitarios, hijos del mercado global de oportunidades, la nueva sociedad del bienestar y la cultura de la conciliación se vuelven tan exigentes como los clientes para conseguir su equilibrio soñado entre lo profesional, lo intelectual y lo personal
¡Oops! espera que esto promete... más abajo sigue diciendo:
Mientras tanto, los portafolios de servicios se profesionalizan a la par que complican (...) y florecen nuevos competidores que veneran a Shiva o tienen los ojos rasgados...
Cuidado, esto está tomando derroteros espinosos ... más adelante es citado un tal Todd Stein (socio y director general de Daemon Quest):
La curva de la natalidad ha provocado que haya menos titulados en ingenierías y empresariales, lo que unido a que la consultoría ahora no tiene el atractivo de hace 15 años, hace que tengamos esta plantilla tan multicultural...
Tomo nota de la reflexión : la consultoría ahora no tiene el atractivo de hace 15 años. Vaya, ...al menos hay alguien que es algo autocrítico.
Pero el tema sigue y para peor:
Pese a que los caladeros latinoamericanos y de Europa del Este se han revelado fructíferos, el sector de la consultoría también está realizando una apuesta fuerte por la formación para hacer frente a esta escasez de profesionales.
Así, la AEC ha lanzado este año un plan formativo dirigido a los empleados de sus empresas asociadas (un total de 90.000 personas) y también de otras firmas que acrediten que forman parte del sector de la consultoría.
Unos 25.000 trabajadores se beneficiarán del proyecto educativo. A él se destinan 10 millones de euros, de los que 9,5 corren a cargo de la Fundación Tripartita para la Formación en el Empleo, de la que forman parte Gobierno, patronales y los sindicatos mayoritarios, y el medio millón restante lo aporta el Plan Avanza del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, destinado a promover la implantación de la sociedad de la información. Entre los objetivos del proyecto de la AEC está el fortalecer profesionalmente el sector, impidiendo que se den abandonos y cambios de trabajo entre quienes lo integran.
¿De verdad creen que por dar cuatro cursos, pagados además con dinero público, van a motivar a nadie a que no abandone y se cambie de trabajo? Lo de caladeros me daría un complejo de bacalao que no me gustaría si fuera un joven recién licenciado
Cada día tengo más claro que la consultoría ya va por dos caminos: la industrializada y la de agente libre en red.
La primera, como se hizo antes en otros negocios, tiene que importar mano de obra especializada porque los autóctonos no la encuentran atractiva (por decirlo suave). Sigue los pasos de la agricultura, servicios de hostelería y limpieza, manufacturas muy manuales, ... eso cuando no se lleva los centros de producción fuera a factorías offshore.
Este tipo de consultoría necesita partners tecnológicos (que las condicionan operativa y comercialmente), compite en precio, en proyectos de ejecución grandes,... implantaciones de grandes sistemas de información o externalizaciones de procesos administrativos (BPO) por ejemplo... no es útil en proyectos pequeños, intensivos en materia gris no en fuerza bruta,... en mi opinión habrá que cambiarles el nombre, no son consultores en el sentido etimológico y semántico del término... no se les consulta, se les contrata para que ejecuten, 10% (o menos de pensamiento) y resto de ejecución.
La segunda - agentes libres en red - basa su fuerza en el conocimiento y la experiencia, flexibilidad, colaboración (aunque esto cuesta) con otros agentes libres, cercanía al cliente, independencia de partners tecnológicos y proveedores de software, ... y parece que está creciendo su número, en gran parte por la deserción de profesionales desde las industrializadas.
... pero esta esa es mi opinión claro.
16 comentarios:
[La consultoría ha perdido glamour para los jóvenes.] No sé, no sé... Haber desarrollado trabajos de consultoría en alguna 'big four' es, para los reclutadores, algo muy codiciado: los periódicos salmón están llenos de anuncios--con sueldos astronómicos--que ya lo exigen. A mis colegas de RRHH les encanta encontrar alguien así.
Creo que a los jóvenes les falta perspectiva: su paso por una consultora deberían plantearla como una inversión a medio-plazo (la consultora, sí te exige 'demasiado' pero, a cambio, tú eres joven y podrás 'colgar' unas cuantas medallas--y de las grandes--en tu CV).
Foguearse con unas condiciones ciertamente duras (horarios, objetivos, presión y estrés, competitividad...) en grandes clientes, en proyectos complejos, con una metodología sólida, una orientación a objetivos muy clara, etc. es lo que justifica que ese perfil sea tan deseado. Cuando ya no eres un recién licenciado y te planteas dejar alguna 'big four' el salto, es cuantitativa y cualitativamente inmejorable respecto a lo que has dejado.
¿Me equivoco?
Artesanas y artesanos, cada vez más. ¡Ánimo!, ¡artesanía en red!
Amalgama, eso me ha sonado mucho a Dune: El baron Vladimir Harkonnen envia a Dune a Glossu Rabban (La Bestia Rabban) para estrujar, oprimir , asesinar y robar al pueblo, de tal manera que cuando llegue Feyd-Rautha Harkonnen (su heredero) lo aclamen como a un heroe....
Basicamente, pasalas putas en una big-four, que despues de eso cualquier cambio sera para mejor....
Antonio
En Expansión y Empleo me encontré ayer la misma frase de Sarriegui. Eso me hace preguntarme si nosotros eramos tan raros o es que las cosas han cambiado mucho (y no sé si a mejor). Por otro lado, que la administración figure como "Best place to work" no creo que sea para sentirse orgulloso.
Despues de ocho años en una big five, me quedo con la reflexión de amalgamadeletras: unos años de consultoría como inversión a medio plazo suele suponer una importante revalorización de la persona en el mercado y con una conclusión personal: si mi hija me pregunta, le recomendaré que trabaje unos años en una de estas empresas.
De todos modos, cuando me relea el Expansión, intentaré aportar algo más.
El glamour se ha perdido entre los potenciales empleados no entre los empleadores que estoy con AdL que sí que lo valoran. Yo tampoco me arrepiento nada de haber trabajado un buen pico de años en una de las consultoras que ahora tienen problemas para encontrar gente - Lo que he aprendido es impagable. El problema es que las generaciones han cambiado, como dice uno de mis clientes, es una generación "low cost" o "show me the money first"... me da la sensación que ahora se enfoca la carrera profesional mucho más a corto plazo y un plazo de inversión de más de 5 años (menos desde luego que no vale la pena) ya no es aceptable/atractivo.
La grandes consultoras parece que no acaban de entender esto y este es mi lamento.
Comentas que las grandes consultoras no han sabido adaptarse a esta generación. Mi duda es si el modelo de negocio lo soporta.
Si el precio de la hora está fijado, la forma de vender es disminuir el número de horas a facturar (que no a ejecutar), asumiendo que va a realizarse un sobreesfuerzo del 15-25% que asumen los consultores del proyecto en forma de "overtime".
Si la gente no quiere asumir esa premisa del sobreesfuerzo y los horarios, tienes difícil ofrecer algo atrayente a ese colectivo.
Justo a eso me refiero Rafa. El modelo de contar con ese 25% de trabajo gratis a cambio de unas perspectivas profesionales es el que está quebrando. El corto plazo es más importante en esta generación que antes, por eso ya no funciona.
Eso a lo que hay que añadir algo que comentas también, el precio fijado y/o competencia en precio/horas es el punto al que se llega tras el proceso de industrialización de los servicios de consultoría. Mientras se crecía con dos dígitos porcentuales todos los excesos eran posibles, cuando el crecimiento ya no es tan alto llega el momento de reducir costes - el gran problema es que el progreso profesional tipo "up or out" imprescindible para que el modelo funcione está ligado a esos crecimientos altos. En el momento que la promoción no es casi automática y que con el esfuerzo sólo ya no basta, se cae todo el montaje... ¡qué tiempos aquellos de subidas de sueldos del 25% e incluso 40% anual en septiembre!
Totalmente de acuerdo con tu definición sobre cierta consultoría industrializada, como ya argumenté en mi post sobre la commoditización de la consultoria. Tienes razón al decir que ya no se contrata consultores, sino ejecutores, y ante la ausencia de diferenciación real, el único driver de competencia es el precio y, como dice Rafa, es un modelo no sostenible.
Por fortuna también me he encontrado con algún agente libre en red, como los defines, pero la mayoría fuera de España, y eran freelances, figura no del todo aceptada en nuestro país, ¿no crees?
Jose Ramón, ciertamente que en este país de individualistas y donde, según un reciente estudio(el que cita Rafa en los comentarios) la empresa favorita para trabajar es la Administración pública, los "agentes libres en red" son bichos raros por doble razón: por "libres" y por "red".
Afortunadamente, mi impresión es que, ya sea por (1) causas de fuerza mayor (gente que a los 55 años se queda en la calle - ayer me explicaron otro caso) (2)por desencanto (en consultorías industrializadas sobre todo) o (3) porque el mensaje está calando, se empiezan a ver cada vez más - al menos en el entorno de la consultoría
Rafa y Luis, ¿de verdad se aprende tanto en la gran consultoría? No he trabajado en las big four o five, pero si en la consultoría y creo que hay tanto que cambiar, estoy tan convencido de la necesidad de una reflexión profunda sobre el modelo, una reflexión en la que intervengan los clientes...
Hace tiempo escribí un artículo sobre la "teoría española y la inglesa" http://legnita.wordpress.com/2006/08/08/la-teoria-espanola/ Aquí seguimos en la españolada sin aprender o aplicar las verdades de perogrullo de Peopleware.
Ángel, se aprende y mucho pero no porque se tenga una varita mágica sino por la variedad, el tipo de proyectos y la "intensidad" de trabajo que se pueden llega a hacer/tener.
Esto como todo es una generalización por lo que habrá casos particulares. En un extremo tendremos la persona que ha estado 5 años picando código en una mega-aplicación concreta y no ha podido salir de ahí, y en el otro aquella que en esos cinco años ha estado en 5 proyectos internacionales aprendiendo de todo: tecnología, inglés, trabajo en equipo, procesos de negocio multinacionales, multiculturalidad, ...
Mi experiencia concreta está en la media: me pasé temporadas bastante frustrantes pero otras que fueron increiblemente enriquecedoras. Yo como Rafa, no me disgustaría que un hijo/hija (eso es lo que tengo)mío empezara su carrera profesional en una gran consultora PERO en las condiciones en las que yo estaba. Lamentablemente ahora es otra cosa y de eso me suelo ir quejando por aquí - ejemplo este post.
Por cierto, muy bueno tu post. Se me escapó en su día, supongo que por la fecha.
Un saludo
@Antonio Valle - Precisamente en el artículo “La consultoría se reinventa” de El País de ayer se hablaba de que las consultoras están, además de traer talento de fuera, apostando por fidelizar al consultor; no es extraño que tengan alta rotación si no ponen freno a ello. No es una “puñalada” es la tendencia del mercado laboral: la conciliación es un paradigma inamovible de los jóvenes y las relaciones empleador-trabajador ya están prácticamente al mismo nivel. Evolución que se llama...
Anteriormente reflexionaba sobre si para el consultor que trabaja 12 horas días le merece la pena y la respuesta parece ser que casi siempre sí.
Ahora mi análisis se desplaza hacia el impacto que tiene en todo el sector trabajar 12 horas, pero facturar 8, horas que proporciona gratuitamente el consultor y que ni paga el cliente ni paga el proveedor.
Mi valoración es que crea unas expectativas insanas que perjudican primero a los profesionales que queremos hacer bien nuestro trabajo, considero que es difícil trabajar bien si se trabajan 12 horas continuamente, y queremos también compatibilizarlo con nuestra vida privada. Pero que también perjudica a las consultoras, ahí está la crisis documentada por la prensa y origen de este artículo, y a los mismos clientes que ponen más el foco en la cantidad que en la calidad y se sumergen en la inercia de jornadas interminables.
Vuelvo a recomendar Peopleware, libro que debería ser de cabecera para cualquier CIO y para muchos otros que peleamos por disfrutar cada día con nuestro trabajo.
Por cierto, ¿alguien sabe si existe una traducción al español?
Ángel, muy bueno - no se me había ocurrido ese punto de vista. Siempre pensamos en el impacto individual directo pero es verdad que esa práctica está distorsionando el sector. Desde un punto de vista académico de pura teoría económica constituye un buen problema: el trabajo no remunerado a corto plazo (se supone que el que lo hace es porque tiene expectativas de recuperar esos beneficios a medio plazo) - esto lleva a una dinámica digna de estudio.
Un saludo
de lo mejor que he leído últimamente. felicidades
PD:
si de consultoría industrializada sabemos todos, quizás tocaría ya empezar a identicar los nodos de los agentes libres en red
Muchas gracias Juan Francisco por la parte que me toca.
Algunos de los nodos que buscas están por los comentarios: unos lo son ya y otros lo son aún en potencia (y creo que no tardaremos mucho en ver su transición).
Muy bueno tu blog - pasa a mi lista de google reader ipso facto.
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