De verdad que reviento si no comparto esta deliciosa anécdota que me ha contado un cliente respecto de su proveedor actual de ERP.
El proveedor en cuestión es uno, como tantos que hay en España, de los que tiene un ERP resultón. Buena funcionalidad, con su centenar de clientes más o menos contentos, 20 o 30 personas en plantilla. Nada que objetar. Bastante tarea tienen con sobrevivir y competir con los tiburones...
La anécdota está en que mi cliente tenía que contactar con una persona del proveedor que había estado unos días antes haciendo una serie de adaptaciones al sistema. Un excelente técnico que les había sacado de un buen problema.
Como no tenían su teléfono directo lo llamaron a la centralita de la empresa. Novelo un poco la situación para hacerlo más ameno pero los hechos objetivos importantes los respeto:
Centralita: XXX software, buenos días, ¿en qué puedo ayudarle?
Cliente: Hola buenos días, me llamo Pepito P de la empresa ZZZ, ¿podría pasarme por favor con Manolito M.?
Centralita: Hola Pepito, soy yo.
Cliente: ¡oh!, no te había conocido la voz. No me esperaba que me contestaras tú directamente
Centralita: Bueno sí, es que hoy me toca centralita. Dime, ¿me llamas por lo de ...?
Mi cliente está ahora con la mosca detrás de la oreja, como podréis comprender
El proveedor en cuestión es uno, como tantos que hay en España, de los que tiene un ERP resultón. Buena funcionalidad, con su centenar de clientes más o menos contentos, 20 o 30 personas en plantilla. Nada que objetar. Bastante tarea tienen con sobrevivir y competir con los tiburones...
La anécdota está en que mi cliente tenía que contactar con una persona del proveedor que había estado unos días antes haciendo una serie de adaptaciones al sistema. Un excelente técnico que les había sacado de un buen problema.
Como no tenían su teléfono directo lo llamaron a la centralita de la empresa. Novelo un poco la situación para hacerlo más ameno pero los hechos objetivos importantes los respeto:
Centralita: XXX software, buenos días, ¿en qué puedo ayudarle?
Cliente: Hola buenos días, me llamo Pepito P de la empresa ZZZ, ¿podría pasarme por favor con Manolito M.?
Centralita: Hola Pepito, soy yo.
Cliente: ¡oh!, no te había conocido la voz. No me esperaba que me contestaras tú directamente
Centralita: Bueno sí, es que hoy me toca centralita. Dime, ¿me llamas por lo de ...?
Mi cliente está ahora con la mosca detrás de la oreja, como podréis comprender
3 comentarios:
Pues estuvo poco ágil, porque podía haberle explicado que están testando un prototipo de sistema experto para sustituir al software de la centralita y que basándose en las estadísticas de últimas llamadas redirige de forma inteligente a la extensión más probable.
Y dicho esto ¿porque no sigues el meme que se ha inventado Lula sobre usos y costumbres en el barrio?.
No será el mismo cliente que proponía comprar al proveedor para evitar riesgos ¿no?
Después de años en la pequeña y mediana empresa (no como vosotros) he visto cosas que no creeríais (¿Cómo era el final de bladerunner?). Y no necesariamente desprestigia al producto construido pero desde luego es un facto de riesgo que muchos no querrán asumir a pesar del precio ¿no?
Jo! lboisset, da gusto tener lectores tan atentos... pues sí, ese mismo.
EL proveedor es solvente, el producto es bueno (tampoco para echar cohetes), pero da miedo, es la triste verdad y es un gran problema para las pequeñas empresas tecnológicas españolas - por cierto ese es un buen tema para un post, ¿te animas?. A ver si se me ocurre algo a mí también.
Un saludo
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